Los servicios de cloud computing en combinación con los nuevos modelos de negocio digital han de ser uno de los motores fundamentales de aumento de la productividad, el empleo y en definitiva del crecimiento económico, al permitir el triple objetivo de reducir costes, desarrollar nuevos servicios y eliminar barreras de entrada.
Igual que la World Wide Web facilitó el acceso universal a la información, el cloud computing permite el acceso universal a potencia computacional (recursos básicos, aplicaciones, redes) de forma sencilla y prácticamente ilimitada.